Los expertos en el Sudario de Oviedo, Guillermo Heras, Felipe Montero, Alfonso Sánchez y Juan Manuel Miñarro, se reunieron en la Universidad Francisco de Vitoria, para exponer sus respectivas consideraciones sobre la “tumba vacía” de Jesús de Nazaret y hacer públicos los resultados de su investigación conjunta.
Ya el iniciador de los estudios científicos, Giulio Ricci, le aseguró dos cosas en 1965: que el Sudario es compatible con el Evangelio de Juan y que hay información en consonancia con Turín. “Usted tiene aquí no solo una reliquia, sino un documento arqueológico serio”.