DOS TELAS, UN HOMBRE, EL MISTERIO

¿QUÉ DICE LA CIENCIA?

- FOTOGRAFÍA-

1. La fotografía revela una imagen inesperada

La Sábana de Turín ―también conocido como la Síndone, la Sábana Santa ― es una tela delino que  muestra la imagen de un hombre que presenta visibles signos de tortura.  La tela mide 441,5 cm × 113,7 cm. Se custodia en Turín, en la capilla de la Sábana Santa ―construida expresamente para ese fin entre 1668 y 1694, durante el reinado del duque Carlos Manuel II de Saboya.

A lo largo de toda su historia, desde el siglo I hasta nuestros días, las comunidades cristianas han custodiado este lienzo. Su recorrido histórico empieza en Jerusalén y pasa por otras cinco ciudades hasta llegar hasta llegar a Turín. Además, su presencia ha dejado una impronta artística y cultural en muchos de los lugares por donde ha pasado. Tal ha sido la relevancia de la Sábana que científicos de distintos ámbitos del saber han querido estudiarla para conocer quién es el hombre de una sábana que se ha ido custodiando con celo de generación en generación.

A continuación, presentamos los estudios científicos realizados sobre la Sábana Santa y los descubrimientos que han surgido a partir de ellos.

La Sábana Santa no había sido fotografiada hasta 1898. Este momento coincidió con varios aniversarios cívicos y religiosos, así como con la boda del futuro Rey Víctor Manuel III. En este contexto, la casa real decidió conmemorar estas ocasiones organizando una ostensión, es decir, una muestra pública de la Sábana Santa.

1.1 LA PRIMERA FOTOGRAFÍA REALIZADA A LA SÁBANA (1898) POR SECONDO PIA

En 1898, el abogado Secondo Pia obtuvo la autorización de la Casa Saboya para fotografiar la Sábana Santa, que en ese momento estaba custodiada por los Duques de Saboya en Chambéry, uno de los muchos lugares por los que había pasado a lo largo de su historia. Durante la ostensión de 1898, una exhibición pública de la Síndone, Pia realizó las fotografías que revelarían una característica inexplicable: la negatividad. Este fenómeno sorprendió a todos, ya que al observar el negativo fotográfico se podía apreciar una imagen mucho más clara y detallada de la figura impresa en el lienzo.

El descubrimiento de la negatividad de la Síndone

La fotografía que hizo Secondo Pia reveló una característica sorprendente del lienzo: la figura del hombre en la Sábana aparece como un negativo fotográfico, con las partes sobresalientes en tonos oscuros y las áreas restantes en tonos claros. Lo inusual fue que la imagen real del sujeto se podía apreciar en el negativo, y no en el positivo. Este descubrimiento despertó un creciente interés en la comunidad científica por el estudio de la tela y llevó a la formación de grupos de investigación estables, como el STURP. Así, se confirmó que el negativo realmente contiene el positivo óptico de la imagen.

En un negativo fotográfico convencional, se produce una doble inversión: lo que aparece blanco en el positivo se muestra negro en el negativo y viceversa (se invierte el claroscuro). Además, lo que está a la derecha en el positivo aparece a la izquierda en el negativo y viceversa. Sin embargo, lo extraordinario es que en este caso fue en el negativo y no en el positivo donde se pudo observar la imagen real del sujeto fotografiado.

Primera fotografía de la Síndone
Negativo de la fotografía anterior

1.2 LA SEGUNDA FOTOGRAFÍA DE LA SÍNDONE (1934) TOMADA POR GIUSEPPE ENRIE

La fotografía que se ve a continuación fue tomada durante la Ostensión de 1934 por el  fotógrafo Giuseppe Enrie. Esta ocasión confirmó el fenómeno observado en las imágenes de Secondo Pia, ya que las nuevas fotografías revelaron características sorprendentes. Las instantáneas en blanco y negro capturadas por Enrie son consideradas insuperables para su época. Se volvió a constatar que el negativo realmente contiene el positivo óptico de la imagen.

En el negativo fotográfico, las manchas de sangre aparecen claramente, ya que en el original son oscuras —como es lógico para la sangre—, mientras que la impronta del cuerpo adquiere su verdadera apariencia en el negativo. Esta singularidad hace que una falsificación medieval sea prácticamente inimaginable; antes de la invención de la fotografía, el concepto mismo de negatividad era desconocido y, sin duda, incomprendido.

Positivo y negativo fotográfico de la impronta frontal
Detalle del negativo a color del rostro.

El científico Yves Delage afirma la veracidad de la fotografía

En París, el científico Yves Delage llevó a cabo un exhaustivo estudio del negativo de la Sábana Santa, que es una copia de la imagen capturada por Secondo Pia. Utilizando una lupa y, en ocasiones, un microscopio para realizar su análisis, Delage llegó a las siguientes conclusiones:

Me parece que esta fotografía es verdadera, sin el menor retoque. La imagen que la Sábana Santa ofrece al visitante se diría que es un negativo. De hecho, las zonas en relieve, por ejemplo, la nariz, los párpados cerrados, los pómulos, están obscuras, y en cambio las partes hundidas están claras. La fotografía, cambiando entre sí las luces y las sombras, me presenta una imagen humana increíblemente nítida, con una perfección anatómica y una belleza de formas que no me hubiera imaginado nunca antes de verla. El cuerpo de este hombre, que hasta hace un momento parecía misterioso e incomprensiblemente impreso al revés, tiene una figura perfectísima. Y este rostro, no puedo negarlo, es verdaderamente sorprendente. Dicen que este es el rostro de Cristo. Yo no lo sé, pero no sé tampoco a qué otra persona puede pertenecer. Y si lo comparo con los retratos de Jesús que desde el Renacimiento han realizado los mejores pintores este los supera a todos. Es por todo esto por lo que quiero saber cómo ha podido formarse esta imagen.

¿Cómo es posible que un lienzo tan antiguo se presente en negativo y hayan hecho falta tantos siglos para conocer el positivo que esconde?

- Has terminado ¿Qué dice la ciencia?: Fotografía -

© INSTITUTO JOHN HENRY NEWMAN - UNIVERSIDAD FRANCISCO DE VITORIA